Una reboda que no deja indiferente a nadie, la Iglesia de la Hermandad de la Esperanza de Triana será el escenario, este sábado, de la boda religiosa entre Francisco Rivera y Lourdes Montes.
Se trata de un espacio pequeño, en el que apenas caben 100 personas, preparado para un enlace que será más íntimo y más discreto que la boda civil celebrada el pasado mes de septiembre, a la que acudieron más de 300 invitados.
Esta vez toda será muy distinto, aunque hay cosas que no cambian, si en aquella ocasión la polémica la originaban las fotografías del enlace que circulaban por la red a causa de algunos incautos invitados, esta vez ha sido la decoración de la capilla la causante de una pequeña trifulca.
El habitáculo se había decorado con árboles con motivo de la unión religiosa de Montes y Rivera pero, ante las protestas de los miembros de la Hermandad en diferentes redes sociales, a primera hora de este sábado se ha procedido retirar la decoración de la capilla.
“¿No hay nadie con cabeza en la junta de la Esp. De Triana? Si el torerito quiere árboles, que se vaya al campo. Inadmisible”, denunciaba un usuario a través de Twitter.
Otros, sin embargo, procedían de diferente forma y aseguraban que la capilla seguiría siendo la misma “con árboles o sin ellos”. La capilla es una planta rectangular con tres naves cuadradas situada en pleno corazón de Sevilla. En la nave central está el altar mayor donde se darán el sí, quiero Fran y Lourdes.
A la izquierda se encuentra el Cristo de las Tres Caídas, situado de tal forma que puede dificultar la visión de los invitados que se sitúen en los asientos que se encuentran alrededor del mismo.
Entre esos invitados habrá una menor presencia de toreros, ya que sólo acudirá Morante de la Puebla, también ha trascendido que, en esta ocasión y tras la polémica ocasionada en la ceremonia civil, Kiko Rivera sí estará entre los asistentes. Respecto a la parte musical, tampoco habrá grupo flamenco, más que la aportación del cantante José Manuel Soto y sus amigos.
Del resto de detalles de la boda, poco más ha trascendido, una de las pistas de cara al convite la ha dado el propio Francisco Rivera mostrando en Twitter una botella de vino con un logo en el que se puede leer ‘Triana’ y que, a buen seguro, será servido durante la celebración posterior al enlace. Se trata de una edición especial del vino de Acontia de la bodega que posee el torero.
En otros tuits,Rivera se muestra ilusionado y feliz ante la cercanía de su boda, ajeno a la polémica que ha causado la decoración de la iglesia.
“Hoy, uno de los días más importantes de mi vida, estoy con una ilusión que jamás imaginé. Por con quien me caso y donde me caso”, ha escrito el diestro nada más levantarse, augurando la felicidad de un día en el que, por fin, podrá cumplir su sueño de casarse por la iglesia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario